En los tiempos presentes donde el impulso del capitalismo neoliberal trata de debilitar al hombre y lo reduce solo a un material entre tantos otros al servicio de la producción y ganancia personal de unos pocos en desmedro de la mayoría es importante ver claramente el papel que verdaderamente juega el trabajador en la sociedad.
El capitalismo, sabio en sus intereses, prepara manipula la necesidades de las personas, acomoda realidades alienando conciencias, arregla las condiciones políticas, su accionar constante de agresiones y su estadía y permanencia demuestra su experticia.
Pero el imperio como el capitalismo tiene un gran enemigo que es la conciencia ciudadana luego ellos se valen de las mas variadas armas para dejarnos inertes en el espacio y lo han logrado, con un poquito de atención podremos detectar que así es, pero con la misma detención también podemos detectar sus malévolas intenciones y enfrentarlas.
Ahora, sin duda, preparar un golpe mental en los seres humanos resulta difícil, de un solo golpe no se dará, no hay forma. Los capitalistas cuentan con todo a su favor, los medios de producción, las materias primas, el trabajo y la necesidad de subsistir.
Usan campañas que pasan desapercibidas, las llaman de diferentes maneras, un día puede ser protección social otro día flexibilidad etc. y, de esa manera, debilitando las conciencias, debilitan la lucha, le quitan su fuerza. En resumen, los capitalistas tienen como estrategia debilitar al ser conciente para debilitar así cualquier acercamiento al Socialismo.
El golpe más fuerte, está dirigido a las bases mismas del pueblo, a los valores morales y éticos que debieran ser el pilar fundamental que sostenga a toda sociedad. Una transformación de nuestros valores. Es una sustitución del amor, fundamento del Socialismo, por el egoísmo, fundamento del Capitalismo. Es ir de una sociedad que se rige por el principio de “solidaridad de todos, el amor de todos”. a una que se rige por el principio aceptado de “guerra de todos contra todos”.
Que campos nos quedan entonces para dar las batallas, solo la conciencia de pertenencia a la clase explotada, es allí donde comienza a decidirse el destino de los procesos, por eso el primer misil es dirigido contra esos valores.
La campaña elaborada por los capitalistas apátridas con ayuda de los capitales nacionales y los lacayos de estos, es una campaña permanente y muy elaborada para sembrar los antivalores, deshumanización, explotación, egoísmo e envidia. Si estudiamos sin apuros las campañas de los candidatos, y de todos los medios y compañías capitalistas, nos daremos cuenta que el centro de su mensaje es estimular las salidas individuales (La propiedad privada que no es la misma que la personal), la solución individual a los problemas sociales. Estimulan así la fragmentación de la sociedad, y ya es sabido por todos que sociedad dividida en afanes aislados, es una sociedad fácil presa de los capitalistas.
Ante esta agresión levantar un muro de valor, de rebeldía, sembrar los valores sociales, los que pregonan que las salidas de los pueblos no son individuales, que sólo en sociedad podemos resolver los problemas fundamentales de la existencia. La lucha ideológica en contra de los valores egoístas del Capitalismo, es una de las batallas más importantes en la guerra asimétrica que el imperio nos plantea.
Por eso resulta fundamental salir a las calles, que las protestas recobren la importancia que tienen, no podemos seguir fragmentando las luchas, las luchas siempre, siempre son integrales, no es solo pelear por una vivienda digna, ni un sueldo decente. Lo que debemos atacar es el sistema en su conjunto y no solo causas de este, si atacamos causas solo resolveremos (Si es que) parte del problema. Por el arreglo de una falencia nos atacan con otras tantas nuevas, así funciona el sistema, pretender que el libre mercado es bueno por que nos da comodidad no forma parte si no de otra cosa que un lavado de cerebro que hasta ahora ha resultado muy fructífero para los capitalistas y nefasto para la población.
Saber quienes somos y de donde venimos, es decir nuestra pertenencia de clase ya es una pequeña batalla ganada, no olvidarlo nunca, es una gran batalla ganada a nuestro favor.
¡¡Hasta Vencer o Morir!!
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